A pesar de que recintos y espacios culturales se vieron forzados a cerrar durante meses por medidas sanitarias, para evitar la propagación de contagios de COVID-19 y que sus actividades se vieron frustradas por esta contingencia, museos reconocidos, compañías de danza, música, teatro, etcétera, se han mantenido presentes compartiendo sus colecciones y funciones en línea, sin embargo, la gran cantidad de espacios culturales independientes y creadores de obra no se han quedado atrás, anteponiéndose a estos tiempos de crisis de una manera interesante utilizando el tema COVID-19 como pretexto de creación plástica, pues la necesidad del arte en medio de esta crisis sanitaria , social y económica, aminora la ansiedad e incertidumbre desencadenadas.
Respecto a las artes plásticas, se han hecho exposiciones colectivas virtuales, sesiones de dibujo con modelo en línea, concursos de dibujo, pintura y gráfica, donde el humor y la reflexión gobiernan el desarrollo del tema. Creadores nos presentan sus trabajos en proceso desde sus talleres, charlas interesantes en línea con docentes y expertos sobre temas de teoría del arte en nuestra contemporaneidad. Incluso hasta se creó el “CAM” The Covid Art Museum, galería virtual donde se recopilan obras de artistas de todo el mundo reconocidos y no reconocidos.
Una propuesta interesante fue la exposición colectiva “Respiro Luego Existo”, exposición virtual en la que se desarrolló la idea de arte objeto a partir de la intervención de cubrebocas, aprovechando que ahora es un accesorio obligatorio en el mundo entero, aminorando sutilmente la intolerancia por muchas personas al uso de éste objeto de protección y apreciándolo ahora visto desde la creatividad de los maestros participantes (obras que aparecen en portada).
Si hacemos una retrospectiva histórica sobre las grandes epidemias que azotaron al mundo, como la peste negra, la gripe española, por mencionar algunas, es interesante ver las representaciones pictóricas que ilustraron lo acontecido, donde el arte fue espejo de las pandemias y su significación dentro del mundo religioso, donde se considera a la enfermedad como castigo divino, versus la intercesión de los santos por las almas de los fallecidos como medio de salvación. Así lo vemos claramente en los ejemplos que a continuación se muestran (Fig. 1 y 2), junto con una alegoría a la muerte (Fig. 3), la cual contrasta con las interpretaciones con los santos, pues narra una escena apocalíptica a través de una panorámica de la muerte. Pinturas que ilustran y dejan constancia de lo devastadoras que fueron estas enfermedades y como lo recreo el artista.
Regresando a nuestro tiempo, son numerosos los murales alrededor del mundo que pintan nuestras ciudades con alegorías a médicos y personal de salud vistos como superhéroes (fig.4), en contraste con los matices siniestros vistos en imágenes de la vestimenta de los médicos de la peste negra (fig. 5), imagen que se volvió icónica en carnavales.
Ya sea que nos encomendemos a la ciencia o la religión para depositar nuestras esperanzas de sobrellevar esta crisis, mientras en la humanidad viva aun ese halo de creatividad y solidaridad para aminorar las desavenencias que ha traído esta pandemia, podremos digerir mejor a través del arte los aprendizajes y reflexiones sobre la nuestra vivencia de esta difícil situación. Quiero concluir este texto aludiendo al pensamiento del filósofo alemán Theodor Adorno quien nos manifiesta cómo en una época de horrores incomprensibles, “solo el arte puede resistir al olvido”. Puesto que el arte funciona como salvador de la memoria de las víctimas de este y muchos otros acontecimientos penosos.
Por: Minette Argüello.
Imágenes de portada: Obras de la exposición virtual Respiro luego existo a cuyos autores pertenecen todos los derechos.
Fig. 1 San Roque entre las víctimas de la peste y la virgen en la gloria.
Giacomo Da Ponte. 1575.
Fig. 2 San Sebastián intercediendo por las víctimas de la plaga.
Josse Lieferinxe Finales del siglo XIV
Fig. 3 El triunfo de la muerte. Pieter Bruegel (el viejo). 1562.
Fig. 4 Mural del artista urbano Applez en CDMX.
Fig.5 Atuendo de medico. Paulus Fürst. 1656